viernes, diciembre 04, 2009

Me gustas esta tarde


Es viernes. Estoy en el paradero de turno esperando el bus habitual (El Sanfelipano, como erróneamente me gusta llamarlo), estoy cansado, el maletín negro casi como una extensión natural de mi cuerpo se tambalea al ritmo del leve viento. Yo con la mirada perdida diviso la marea de autos que uno tras otro forman ese horrible cuadro llamado tráfico. Pasa media hora y todos los bus que me llevan a casa se desvían para huir de la congestión, de paso me desvían a mi que sigo con la mirada perdida y pienso en la nada mientras mi mp3 suena con el instrumental de Muse haciendo del viento y el cielo gris melodías para mis ojos y de la espera un armonioso vaivén.

Mis ojos se desvían de la nada y se posan ingenuos en la figura de una hermosa dama, como hago habitualmente en estos casos retorno mis pupilas a su andar anodino pero ellos tercos o rebeldes esta vez regresan magnetizados a la visión femenina. Mi mente en blanco recorre su rostro y doy cuenta de una belleza muy fina, tanto como para volverme cursi escribiendo en este momento, por ello aparto mis ojos una vez más para no pecar de traficante de miradas, que soy tímido hasta para cruzarlas. Pero vuelvo la mirada... una... y otra vez. Detesto a la gente que se emboba mirando un hermoso cuerpo y se anima a piropear creyéndose dueños del momento, por eso me limito a pensar en nada mientras sigiloso rodeo su figura con mi detector de imperfecciones y aunque no creo haber puesto cara de idiota, sí que lo estaba ante una mujer tan hermosa siendo que no era impresionante pero como imán que no lástima atrae de forma imperdonable al que se atreva a acercarse.

Cosas curiosas. Ya que no pude tomar el bus correcto me atreví a subirme a otro que me hiciera avanzar lo suficiente para retomar el viaje en otro... subí, me senté y acomodé, alcé la mirada para divisar el paisaje vehicular y no pude obviar el hecho de que ella tomara el mismo bus. El viaje se hizo larguísimo y no pude esquivar el sueño, al despertar lamenté no haber podido verla de nuevo y cuando me disponía a bajar vi como la protagonista de mi tarde ya estaba en la puerta para bajar. Casualidad que me hizo esbozar una falsa sonrisa. En el segundo paradero ella se me adelantó y paró el bus que yo iba a parar para llegar por fin a casa, ante tamaña casualidad no pude evitar soltar una sonrisa sincera, de esas que nadie puede darse el lujo de haber visto en mi rostro. Dudé de subir o no por temor a que ella piense que la vengo siguiendo desde tan lejos pero no vi nada de malo y estaba cansado para esperar otro transporte. No sé si fue mi fértil imaginación o el cansancio que venía arrastrando pero me pareció ver que en una breve mirada notó que el chico que había visto kilómetros atrás seguía a escasos metros de ella y en la misma travesía. Se desocupó un asiento y ni me inmuté en observar para que ella se sentara cómoda para el resto del viaje.

Han pasado ya horas desde aquella anécdota que no debería merecer mención y menos tantas letras puestas en este blog lleno de imaginación y ficción, pero regresando a mis tiempos de juventud, en esta tarde saqué uno de esos papeles que había roto en la mañana y al no encontrar donde botar puse en uno de mis bolsillos, ahora llegaban precisos para poner sobre el más afortunado un poco de mi tinta... poetrya.blogspot.com ... fue todo lo que pude poner en ese tambaleo en que me traía el bus, lo regresé al bolsillo de mi camisa y antes de bajar y con toda mi timidez bañando mi ser me giré hacia ella y le dije esta vez sí con cara de idiota: Señorita... extendiendo mi mano con aquel papelito sacado de mi bolsillo, mientras iba recibiéndolo muy amable ella y acercando sus ojos a esas escasas letras, me bajé y esta vez la sonrisa dibujada en mi rostro se hizo completa, esa que ni yo mismo conocía.

Me sentí como un niño de 10 años y actué como tal, vi una chica en la calle y me gustó, ese amor a primera vista que no existe pero en letras se hace apetecible contar, esas casualidades que no le importan a nadie excepto al atento y minucioso, esa hazaña infantil que hace reir a los aventureros pero a los que hemos sido adormecidos con el tedio de los días... nos hace grandes... nos hace sonreir y decir: Tenía novio, estoy seguro que hablarle hubiera sido ridículo, pero al menos le resumí toda mi falsa sabiduría en una dirección: Poetrya.

Si viniste, disculpa la osadía y la extraña invitación, me gustas y soy niño los viernes con el tráfico a cuestas, ten un buen día y no te preocupes, no te venía siguiendo, me gustan las casualidades. Son hermanas de las causalidades.

Nos vemos en el próximo bus.

6 comentarios:

Paco Alonso dijo...

Gracias amigo...me retornaste a esa edad en que las chicas me miraban, tímidamente me surgían los colores en la cara y escondía mi mirada para no trasmitir esa flaqueza de inseguridad acobardada.

Gracias por compartir.

Cálido abrazo.

AMOR dijo...

Un escrito y una vivencia muy entrañable, como deduzco que eres tu, gracias por tu visita y te sigo muy de cerca.
Besazos del primer suspiro y el antepenultimo orgasmo

/ dijo...

Una historia fantástica! Cualquier otro le hubiese escrito el teléfono, y vos le diste el nombre de tu blog!
Genial, romántico, audaz y absolutamente novedoso, me encantó!

BESOTES AMIGO Y BUEN FINDE!

Apple dijo...

hey linda historia!,, yo no creo que exista el amor a primra vista, pero si "enamoramiento" a primera vista...

y hey! que original, dar la URL de tu blog.. que un simple numero telefonico.... creo que tu blog da muchas buenas de que hablar!...

saludos!!!!
y que sigas teniendo felices casualidades!!

Anónimo dijo...

Tio....que nervios la verdad....y si te gusto aun mas....jejej que res un niño...jejejej
Y como es eso...de que Nos vemos en el Sgte bus..si que le seguias....jajaja (BROMA XD)
A mi tambien me paso algo parecido...pero cuando tenia 10 años de verdad...XD
Saludos

Yobber Gut Vas dijo...

Paco. Que bueno que mi historia te haya servido de viaje a ese pasado tímido que nos fortalece y forja actitud. Son esas cosas de la juventud que uno recuerda ya sin sonrojos y sí con simpatía. Gracias a ti por siempre visitar y comentar. Saludos.

Amor. Fue un escrito muy casual en realidad, a veces es bueno algo de simpleza para calmar los días ajetreados y las aventuras sísmicas. Un beso grande del último suspiro y el primer orgasmo literario.

Stanley. Gracias por lo de fantástica. Precisamente en eso estuvo el único rasgo de mi presente, que no quise nada de ella y tampoco darle nada, algo que en mi juventud hubiera sido imperioso, la necesidad de saber su nombre, decirle el mío. Ahora sólo quise alzar la mano y darle un papel. Un abrazo y buen fin de semana a ti.

Apple. Yo tampoco creo en el amor a primera, por eso mencioné lo de ficticio en mis letras, el gustar y enamoramiento sí es más sencillo y superficial, por ello usé de protagonista para mi tarde a una fugaz anécdota que al poner por escrito se hace más humana y menos ficticia. Lo de la URL se me ocurrió para no caer en la ridiculez del número ni lo intrusorio de mi nombre o correo, pero pensándolo bien mi blog es más extraño que los otros datos, jeje, creo que a la próxima escribo un chiste en el papel xD. Un beso casual!

Markus. Jaja, si soy un niño qué bueno, me quitas mucha carga calendaria de encima. El final es el broche de oro, de repente la veo el próximo viernes px, jaj. A muchos nos pasa lo mismo en la niñez pero hacerlo ahora de grande es genial, es como volver a dar el primer beso o volver a volver a tu escuela y recorrer tus recuerdos. Gracias por siempre venir, saludos man.