martes, abril 27, 2010

El Sepulturero.

Iober:
uhmmm
yo tengo una historia
se llama
EL SEPULTURERO
se me ocurrió hace poco

Mar  :
sí me dijiste ayer

Iober:
pero

Mar  :
y cuando piensas publicarla?

Iober:
te conté de qué iba?
no sé cuándo publicarla aún

Mar  :
Noup

Iober:
la hermana de mi abuela
es decir mi tía abuela
lleva más de 50 años de casada con su esposo
mi tío abuelo
ellos tienen más de 70 años
y tuvieron dos hijos
que fallecieron a los 30 y 35 años
por enfermedades

Mar  :
D: ...

Iober:
sepultar a tus hijos dicen que es lo peor
no es el orden correcto de las cosas, debería ser al revés
ellos viven solos en una gran casa
mi tia abuela ha enfermado y mi tío
un caballero a la vieja usanza
un ejemplo en verdad
le cocina
la lleva al hospital cada dos días
limpia la casa
hace de todo
cuando salen
la lleva de la mano
le abre las puertas
es todo un caballero
un ejemplo para mi
como mi padre ha enfermado
y mi madre no anda de lo mejor tampoco
se me ocurrió algo
la historia va más o menos así:
-pero antes, deseas escucharla?-
Uhmm

Mar  :
obvio que siii
soy toda ojos!!!

Iober:
pues, no podrás escucharla xD
pero podrás leerla como bien dices

Iober:
Yobber era un tipo apagado
que una tarde cualquiera fue sorprendido con la muerte de su primo
lo conocía someramente y no eran afines ni muy cercanos
asistió por compromiso al sepelio y estando ahí entre tanto murmuro y tristeza
como cualquiera que haya asistido cuando sepultan a alguien
en medio del silencio te pones a pensar
Reflexionar
sobre como acabaremos todo
si vale la pena lo que hacemos
y si no estamos perdiendo el tiempo en cosas vanas
Yobber se quedó en el cementerio hasta después que todos se fueron
porque quería saber qué pasaba después
y porque las reflexiones le ganaron el pensamiento
estando ahi en el cementerio su único acompañante era el sepulturero
aquel que ya cavado el hoyo en el suelo, baja el ataud y le echa tierra al olvido
Yobber se preguntaba cuánta frialdad habría en ese hombre para enterrar muertos todos los días
sin importarle cuánta vida había detrás
era su trabajo post mortem
pasaron los años
y Yobber se casó
al año siguiente falleció su madre
estando ahí no pudo contener las lágrimas
y al igual que años antes
se quedó en el cementerio hasta cuando todos se habían ido
pero el sepulturero seguía ahí
el mismo de hace años
con la sonrisa muerta
y echando tierra al cuerpo inerte de su madre
Yobber ya seco de lágrimas de compadeció de tal hombre
que convivía con los muertos
y hacía lo mismo año tras año.
Pasaron los años y Yobber tuvo dos hijos con su esposa
en el camino murió su padre
y tuvo la pérdida de su única hermana
pero no fue hasta que el menor de sus hijos por una insuficiencia respiratoria falleciera
a sus 25 años
Yobber fue molido al suelo con la noticia.
El mismo cementerio
el mismo sepulturero
jamás intercambiaron palabras
pero el ritual se repetía
el hoyo
la tierra
el silencio
nada más
la muerte se lo había llevado todo

Mar  :
ohhh

Iober:
el sepulturero estaba ahí
Yobber estaba ahí
y le dolió en el alma
la vida de tal hombre
porque si su hijo murió a temprana edad
aquel hombre vivia horas demás
una vida llena de muerte a su alrededor
una vida triste
desde los ojos de Yobber
La esposa de Yobber no soportó el dolor
y a dos años de su hijo
ella lo acompañó
paro cardiaco de primer grado
Yobber se sintió morir
era el ritmo natural de la vida
tenían 55 años
y su acompañante se habia ido
habia mucha gente en el cementerio
ella era muy querida
Yobber se preguntaba si para su muerte asistiria tanta gente
y solo se repondia: No creo.
aquella gran multitud llorosa y acongojada no duró más de unas horas
hasta que el cementerio quedó vacío de vida
y sólo el ataud adornaba el suelo
acompañado de rosas multicolores
y una música de fondo que su esposa años atras le pidió a Yobber si algún día se iba
él cumplió su palabra
el sepulturero sin inmutarse por la presencia de aquel visitante foráneo
solo atinaba a echar tierra
una y otra vez
el cielo andaba rojo
y los ojos de Yobber tenían el mismo color
de tanto llorar en silencio
con sus lentes oscuros
El visitante lloroso quiso preguntarle el nombre al tipo
despues de tantos años
pero no se atrevió

Mar  :
...

Iober:
y se fue antes de que la última luz entrara al hoyo
antes de que su esposa quede en paz eterna.
Cuando cunplió 60
su regalo de cumpleaños
aquel 2 de enero
fue una ida
su hijo de 40 años
partía al infinito
acompañando a toda su familia a donde él no iba aún
esta vez hubo menos gente
al igual que Yobber, su hijo era un tipo frio
y nunca se casó
era una tarde despejada
con menos bulla que el último funeral
de su esposa
Yobber esta vez no lloraba
se le habían secado las lágrimas
luego de sus padres
su hermana
su hijo, su esposa
su hijo
estaba solo ahora
o tal vez no
el sepulturero aun vivía
Yobber se sorprendio de ello
cuantos años tendria aquel hombre?
tantos años trabajando en el viejo cementerio del pueblo
enterró a toda su familia
y ahora a su ultimo hijo
esta vez se acercó al hombre despues de los eventos fúnebres
y lo saludó
Hola
mi nombre es Yobber
buen hombre, cómo se llama
y el sepulturero levantando la pala para cargar tierra y echarla en el ataud
sólo atinó a decir:
La muerte se lleva lo que conoces
lo que no conoces, así muera, no es muerte
todos los dias mueren personas
pero solo vemos lo que conocemos
y lloramos sólo cuando nos toca
pero yo que vivo la muerte de todos
puedo decirte, viejo hombre,
que si el respirar nos doliera lloraríamos cada segundo
esto es igual
pero no vemos los respiros de todos
apenas de los que conocemos
no necesitas saber mi nombre
te ahorrarás una muerte, jaja
y sonrió de medio lado, aquel viejo hombre sepulturero
Yobber sonrió también
porque vio sinceridad en sus palabras
y partió a su casa.
Un año después
después de asear la casa
y cocinarse alguna merienda
salió a caminar
él tenía ya 60 años
y una casa fría y sola para él
no había mucha gente a la que llamar
así que solía caminar por la orilla del mar cada tarde
y escribir algunas cosas en hojitas blancas
que botaba al final de cada escrito
solo para alimentar de letras el mar
o simplemente escribirle a su familia
a donde quiera que llegue la hojita
aquella tarde hacia mucho frio en la playa
y su tos se habia pronunciado debido a su asma crónico
veia el fin cerca
y no se mortificaba
era lo que esparaba hace años
como aun no queria regresar a casa
se le ocurrió dar una vuelta por su casi segundo hogar
el cementerio
visitar al viejo sepulturero, ya no para presenciar un sepulcro
sino para saludarlo simplemente
libres de toda muerte
dos viejos en un cementerio
entró despacio
mirando cada lápida en el piso
Sus padres uno junto al junto
su hermana un poco más allá adornada con flores rojas puestas por él
sus hijos alejados un poco
como en la vida real fue
su amada en una lápida grabada con un poema que él le dedico apenas la conoció
llena de flores alrededor
y siguó caminando hasta encontrarse con el sepulterero
pero en su lugar encontró a un viejo joven
a un joven en realidad
no tendría más de 20 años
y estaba sentado descansando
Yobber se acercó y le preguntó:
Joven, donde está el viejo hombre que trabajaba aquí
el sepulturero, disculpa que no sepa su nombre
el joven alzó la mirada y respondió:
debe ser el que está ahi abajo, en ese ataud
Yobber miró el hoyo recién cavado
y una madera vieja y corroida
en forma de ataud
no había mas personas
ni flores
no habian lagrimas
ni sollozos
ni el cielo estaba rojo
el joven continuó:
Me llamaron hoy para trabajar, estaba echando tierra pero el trabajo es muy duro
creo que me retiro a descansar y continuar esto despues
total, no creo que el viejo se escape, jaja
y se fue en su risa burlona
Yobber en su silencio
entendió muchas cosas
el viejo vivía en su frialdad, pero siempre respetó su trabajo
y a cada persona enterrada le aferraba su fuerza
en cada brazada
nunca vio al viejo descansar hasta tener al muerto enterrado
hasta verlo en paz
así que se quitó la chaqueta
y empezó a echar tierra
una lágrima honda recorrió su mejilla mientras lo hacía
y viajó por su brazo
alcanzó la pala
y llegó hasta la tierra que lanzaba
para posarse finalmente en el ataud
y casi en silencio se pensó:
Al final
todos se han ido
y
el sepulturero soy yo.
FIN.

EL SEPULTURERO.

2 comentarios:

Apple dijo...

que impresion!!.. O.O

supongo que mar se ha de sentir verdaderamente afortunada de haber oido esa maravillosa historia!

tan impactante, destrozante, doloroso final!

saber que al final solo quedamos acompañados de nuestra alma y de la de los que ya no estan u_u

hablar de la muerte no es tan facil...
contar una historia puede parecerlo, pero cuando el narrador se convierte en el protagonista... parece ser dura la situacion u_U
yo no podríaa... de vrad yo no podría!...

pero ... tu si pudiste... y me vuelvo a poner de pie... para aplaudorle señor yob... y pedirle que esto vaya directo a un libro u_U!!!

mis respetos a tu inteligencia, imagincaion,valentia y a tus maravillosas letras!!

un besooo con A. mi.a.

H e l e n a... dijo...

Gran historia ....
Dolor, lágrimas, ironía de la vida.
Y así pasa, así es esto.
¿Como todo se acaba todo se va en aquel hoyo?
tanta vida se acaba en un puñado de tierra no?
Triste realidad, pero conmovedora.




Un abrazo Yob :)